El Poder Judicial implementará un sistema de matriculación electrónica, aprobado en junio pasado, que permitirá el seguimiento en tiempo real de los antecedentes de los profesionales registrados, ofreciendo información detallada y precisa para ciertos procesos.
El ministro Alberto Martínez Simón detalló que este proyecto, que se está desarrollando desde 2022, incluye no solo a abogados, sino también a otros auxiliares como escribanos, rematadores y peritos. «Queremos dar un paso cualitativo y desmaterializar estas matrículas, de modo que sean completamente electrónicas», señaló.
El proyecto implica el desarrollo de un módulo en el portal de gestión de partes del sistema que los profesionales utilizan para solicitar y expedir el carnet digital. Además, permitirá el seguimiento en tiempo real del trámite de matriculación. «El abogado o profesional que quiera habilitarse para trabajar en el Poder Judicial podrá seguir su trámite en tiempo real», explicó el vicepresidente segundo del Consejo de Superintendencia.
Asimismo, se ha trabajado en un sistema de gestión de solicitudes para ser utilizado por la Secretaría General de la Corte, que incluirá la firma digital masiva para la gestión de estas credenciales digitales. Estas contarán con mecanismos de seguridad y podrán ser verificadas a través de un código QR, que permitirá consultar los antecedentes del abogado, incluyendo si está suspendido o si su matrícula ha sido cancelada.
Adicionalmente, se incluirán datos profesionales y antecedentes académicos de los abogados, para que los ciudadanos puedan tener una información completa sobre el profesional que los representará. «Creemos que este es un paso cualitativo muy importante», destacó Martínez Simón.
El ministro Ramírez Candia sugirió la expedición de cédulas transitorias mientras se realiza la gestión de la matrícula digital, considerando que es una necesidad especialmente en el interior del país y un reclamo constante de los gremios profesionales.
Martínez Simón aclaró que los datos disponibles serán migrados al nuevo formato digital, dejando sin efecto las matriculaciones anteriores. «Esto implica que, en casos de falsificación o suspensión de matrículas, el nuevo sistema digital será el único modo de identificación para los profesionales», concluyó.
